En el momento más difícil de la emergencia por la pandemia del Covid-19; cuando el país y los mexicanos necesitamos de las acciones más eficaces, cuando se requiere del trabajo más arduo, cuando la gente se está contagiando y muriendo, cuando los hospitales no atienden otra enfermedad que no sea el Coronavirus, el presidente de México le brinda toda su fuerza a combatir a las ahora malditas redes sociales.
Es indiscutible que el presidente Andrés López Obrador no se siente a gusto con los millones de comentarios, críticas y hasta ofensas que circulan por las redes sociales en torno al desempeño de su gobierno, ni siquiera de él, en lo personal, aunque sí hay muchas críticas contra su persona y su desempeño, pero es generalizada la crítica contra el gobierno.
El 19 de abril, en este mismo espacio, en la Línea Fifí, hablamos de que en los momentos coyunturales y de los mayores retos, se muestra a los líderes con sus acciones y sus aciertos, o bien se conoce a los gobernantes que no responden a las expectativas ni a la altura de las circunstancias.
Hoy ha llegado el momento de saber quién lidera al gobierno de la cuarta transformación y los hechos están a la vista, ni él está conforme con la respuesta ciudadana ni el pueblo está conforme con las acciones de gobierno, pues hay grandes fallas de comunicación que confunden a la sociedad, que desorientan o que malinforman.
Hace apenas horas, en una de sus conferencias mañaneras, el presidente se fue contra Twitter, la empresa que brinda el servicio, diciendo que esa red social es la que crea los bots que lo atacan, pero la empresa presta el servicio y cada persona es responsable de lo que dice o de lo que hace.
Sí, es posible que algunos usuarios o muchos de ellos utilicen trucos tecnológicos que les permitan reproducir mensajes de manera masiva, pero no pueden ser mayoría.
Hay que tomar en cuenta que como candidato o aspirante presidencial, criticó por lustros las acciones de los gobiernos, incluso en 2009, cuando el panista Felipe Calderón gobernaba, se le presentó la epidemia de Influenza H1N1 y el ahora presidente criticó sus acciones e incluso insinuó la posibilidad de que renunciara el mandatario por sus acciones insuficientes y desacertadas.
Las cosas cambian, los toros no se ven igual desde la barrera que desde el ruedo, antes desde las “benditas redes sociales” lo apoyaban aquellos 30 millones de mexicanos que votaron por Morena en 2018, las expectativas de su gobierno fueron bien construidas y la gente confió en las propuestas.
También comentamos hace una semana sobre la forma en que, incluso el diputado Porfirio Muñoz Ledo, quien le impuso la Banda Presidencial el 1 de diciembre de 2018, ya le retiró su apoyo y apenas esta semana se congratuló por haberse concretado en el Senado de la República, la acción de un bloque opositor que evitó un período extraordinario de sesiones que buscaba aprobar una ley que le permita tomar todas las decisiones que se le antoje en torno al uso del presupuesto federal.
Igual que Don Porfirio, por mencionar solamente estos dos casos emblemáticos, la senadora Lily Téllez, hace algunos meses decidió abandonar la bancada de Morena, debido a las diferencias en los criterios y por no avalar los abusos de Poder. Apenas este miércoles criticó, desde su cuenta de Twitter diciendo “en campaña. Benditas redes sociales; en el poder: “Malditas redes sociales”.
Y no es que las redes sociales hayan cambiado, no es que el FaceBoock sea otro, lo que sucede es que desde el Twitter y desde todas las plataformas de libre expresión de los ciudadanos, han manifestado su inconformidad y el cambio ha sido tan radical en la forma de ver al mandatario, que pareciera que de trata de campañas orquestadas.
El presidente está mal asesorado en materia de redes sociales, de Bots y de campañas, el problema es que ahora, cuando los ciudadanos necesitan, esperan y buscan una respuesta eficaz, una declaración o un informe que les de confianza y que les salve la vida y la de sus familiares, no hay las camas que se ofrecieron ni la disponibilidad de los hospitales, tampoco se observa un plan firme de combate a la pandemia, los mexicanos no vemos algo que nos de la seguridad de que no moriremos en este período de emergencia.
No Soy Un Bot, han respondido quienes hoy critican en las redes sociales al gobierno y dan la cara, muchos muestran sus credenciales de elector, mucha de la gente que hoy critica al gobierno, como candidato lo apoyó, pero al igual que el diputado Muñoz Ledo y la senadora Lily Téllez se han decepcionado.
El voto y la aprobación de un gobernante se construye con trabajo, con aciertos de gobierno, con liderazgo, con acciones en favor del pueblo las principales características de un líder son que su pensamiento, sus acciones y sus declaraciones son congruentes con una misma línea.
No Soy Un Bot
Sigamos por la línea Fifí.
NO SOY UN BOT, AHORA LO CONOCEMOS
