Pareciera que no es suficiente que al presidente Andrés López Obrador se le califique como el peor mandatario del mundo en su estrategia para prevenir los contagios de Covid–19 o Coronavirus y también, uno de los empresarios más morenistas, asegura que sus negocios operarán de manera normal, porque de otra manera “los mexicanos van a morir de hambre”.
Contrario a lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS), los gobiernos de países que han sufrido los peores embates de la mortal enfermedad y también contrario a lo que la lógica de supervivencia recomendaría, Ricardo Salinas Pliego, dueño de Grupo Salinas, de Electra y de Televisión Azteca, entre muchas otras empresas, dice que la gente salga a trabajar.
A lo largo de esta crisis de salud pública mundial, el presidente López Obrador ha sido criticado en todo el orbe por mantener su actividad, que pareciera de campaña, por diversos estados del país, saludando a diestra y siniestra, babeando y besuqueando a los niños.
Pero el subsecretario de Salud, Hugo López Gatell, vocero y quien da la cara de parte del gobierno para hablar del Covid-19 asegura que López Obrador tiene un poder moral que no contagia, por el contrario, “ojalá y que se infecte, para que su poder de sanidad, lo haga más inmune y se fortalecerá”.
Se trata de una cadena de irresponsabilidades, empresariales y gubernamentales, pues mientras algunos de los empresarios, han mostrado su generosidad haciendo aportaciones para equipo y medicamentos, este señor asegura que el Coronavirus no es letal, pero el hambre sí lo es.
La vida de los mexicanos no es algo con lo que se deba jugar, Salinas Pliego asegura que habría un desastre económico que mataría de hambre a los mexicanos si se paraliza la actividad empresarial.
Se trata de un empresario que se niega a soportar los embates de una situación de salud, cuyo sentido de solidaridad no existe y lo demuestra en este caso de vida o de muerte como es la pandemia de Covid-19.
Y no es un improvisado el que recomienda aislarse, dejar de salir a la calle, es la Organización Mundial de la Salud, quien ha recomendado que México asuma las acciones y previsiones de la Fase 2 de la contingencia sanitaria, en donde se corre el riesgo de contagio masivo.
Por lo que hace a Salinas Pliego, pareciera desconocer la realidad del país, pues su posición contrasta con otros, como Carlos Slim, quien se comprometió a no despedir a los empleados que se aíslen en la contingencia, pero además donó mil millones de pesos para la compra de respiradores que pueden salvar miles de vidas-
A su vez, Germán Larrea, uno de los más importantes mineros en el país, dueño del Grupo México, anunció que donará un hospital móvil para dar servicio a una de las zonas más pobres y golpeadas por los desastres naturales, que es Juchitán, en el estado de Oaxaca.
Polémica, sin duda es la posición del empresario mueblero y televisivo, Salinas Pliego parecía una persona humana, sensible y muy responsable. Pareciera que la contaminación de la cuarta transformación ha cambiado los sentidos de Ricardo Salinas Pliego.
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